La carrera te permite quemar una media de 45 a 50 calorías por kilometro,dependiendo de cada persona, su peso y su eficiencia al correr. Lo máscurioso es que este calculo no depende apenas de la velocidad a la quevayas. Lo que ocurre es que cuanto más deprisa vayas más distanciarecorrerás en el mismo tiempo y por lo tanto más calorías quemarás en esemismo tiempo. Luego esta el hecho de que correr acelera tu metabolismo y que este efectose mantiene durante varias horas después de parar de correr. Esto se traduceen que quemas más calorías durante esas horas incluso si después de correrte vas a dormir.Los músculos pueden quemar como combustible tanto la glucosa como losácidos grasos que nosotros identificamos como grasa corporal.
Cuanto másrápido vayas (por encima del umbral del 70% de esfuerzo aeróbico máximo),más glucosa quemas. Si vas más despacio (alrededor del 60%) es cuandoquemas más grasa. Por eso si estás empezando y tu principal objetivo paracorrer es adelgazar, lo mejor es mantenerse durante mucho tiempo a unritmo suave, que te permita mantener una conversación con tus compañerasde entrenamiento. Sin embargo si estás entrenada te interesa más ir a unritmo más alto. La razón está en que a más velocidad consumes muchísimasmás calorías que a ritmo lento, de forma que aunque proporcionalmente sequeme más grasa despacio que rápido el resultado global de grasa quemadasigue siendo más favorable para los ritmos veloces. Si no te queda claro mirael ejemplo, basado en estudios de la Universidad de Texas, con grupos decorredores lentos y rápidos.
En una hora un corredor lento gasta en torno a 420 Kcal (de las cuales el90%, o sea 378 provienen de la grasa) mientras que los rápidos en esemismo tiempo consumen el doble, 840 Kcal (de las que el 60%, o 504 seobtienen quemando grasa). Con 504 Kcal procedentes de la grasa quemadasfrente a 378, los rápidos llevaban la ventaja.Otro punto positivo de correr para adelgazar es que es una actividad que noredunda en un significante incremento del apetito. Incluso hay quienasegura que tiene menos apetito cuando corre. Pero ya que estás en ello, lomejor para estimular tu capacidad de entrenamiento es reducir tu ingesta degrasas e incrementar tu ingesta de vegetales para conseguir una dieta másequilibrada y mayor energía para correr ligera.Luego entras en un círculo vicioso de lo más positivo. Porque a medida quevas perdiendo peso te notarás más ligera al correr y eso hará que corrasmejor, y esto a su vez hará que tengas más ilusión por entrenar, que tediviertas más haciéndolo y perderás el peso con más alegría. Además cuantomás peso pierdas, más beneficiadas saldrán tus rodillas y tus tobillos, ya quetendrás menos posibilidades de dañarlos.
Por último recuerda el tiempo que te ha llevado ganar esos kilos de más yten paciencia. El milagro de los ‘kilos desaparecidos en un día’ no existe.Tardarás en ver los resultados en la báscula si simplemente te limitas aempezar a correr. Pero piensa también que podrás perder una media de unkilo por mes, haciendo tres entrenamientos semanales de una hora. Sicambias tus hábitos alimenticios y le añades algo de pesas esto puedeincrementarse notablemente.
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